El regalo de un pensamiento no enriquece solamente a quien lo recibe.

Cuando empiezas a creer que has entendido verdaderamente mucho de la vida, te das cuenta también que falta poco para que se termine.

Es celoso de lo que posee el que tiene miedo de perderlo. Es envidioso de lo que no posee, el que teme no poder obtenerlo.

Cuando mantener vivo un recuerdo empieza a ser difícil es preferible olvidarse de él.

Muy seguido el pudor no es otra cosa que el miedo de no lograr mostrarnos como quisiéramos.

No saber que se sabe es peor que no saber.

En la vida, la superioridad de quien responde respecto al que hace las preguntas llega a ser inversamente proporcional cuando ya no vamos más a la escuela.

Un abrazo puede ser universal si nace de una idea.

Entre un grano de arena y un granito no existe ninguna diferencia. Ambos son infinitos.

El hombre sigue su líder mientras espera la ocasión favorable para matarlo.