Etiquetas
Sueño
07 lunes Oct 2019
Posted Sueño
in07 lunes Oct 2019
Posted Sueño
inEtiquetas
11 domingo Ago 2019
Posted Sueño
inEtiquetas
Tiempo atrás soñé esto: una muchacha rubia y con un aspecto bastante agradable, triste y acongojada porque su hombre la quiere abandonar, implora a un individuo, del que recuerdo sólo el enorme sombrero negro de alas anchas, para que la ayude. Para obtener que éste convenza u obligue el hombre amado a permanecer en la ciudad donde vive ella, le da veintimil euros que son todos sus ahorros. El individuo acepta y le promete que hará realidad su deseo.
Pocos días después el avión en el que se encuentra el hombre de la muchacha explota mientras vuela y lo que queda de su cuerpo viene sepulto en una tumba cuyo valor es de veintimil euros exactos. La muchacha muy abatida le pregunta al individuo del gran sombrero porqué le hizo todo esto.
“¿No es lo que deseabas?” le responde el hombre y, con una sonrisa irónica, se va.
Cuando me desperté entendí cómo, a veces, nacen las inspiraciones para mis cuentos…
26 jueves Jul 2018
Posted Sueño
inEtiquetas
En la estepa desmesurada el caballero sin rostro cavalga su negro corcel.
En el horizonte, por pocos segundos, su imagen se recorta nítida y superbia, luego desaparece, devorada por la oscuridad de la noche.
¿Un sueño? ¿Un deseo? ¿Una pesadilla? ¿O sólo un breve regreso a las fantasías de la infancia?
03 jueves Nov 2016
Posted Sueño
inEtiquetas
Sueño de esta noche:
En una maravillosa, pero desconocida, zona arbolada en las afueras de la ciudad, una persona que conozco estaba jugando a la pelota con un médico cirujano.
Me había parado un momento para observarlos cuando la pelota, lanzada con excesiva fuerza, llegó hasta mí. La recogí y, sin quererlo, la tiré más lejos de lo debido, perdiéndose entre la vegetación que crecía a sus espaldas.
Decidí en seguida de ir a buscar la pelota. Mientras caminaba apartando las ramas y con la mirada fija en el suelo, me encontré, sin darme cuenta, frente a un árbol enorme y maravilloso. Las raíces, grandes y contorcidas, en algunos puntos brotaban del suelo y luego volvían a hundirse como grandes serpientes que buscan un lugar fresco. Las ramas, llenas de hojas pero sin frutos, abrían sus brazos nudosos superando todas mis fantasías.
Mientras admiraba extasiado lo que imprevistamente capturaba y robaba mis ojos, una voz me hizo girar la cabeza. Era un hombre de treinta años aproximadamente, con un aspecto descuidado e insignificante, que venía en bicicleta cantando una canción: “Si vas de paseo, no importa si te crece un cabello blanco porque vas a ver un árbol maravilloso que creció sólo para ti”.
20 viernes May 2016
Posted Sueño
inEtiquetas
En la quietud de la noche simultáneamente sueño y vigilia se entrelazan para entregarse a la impalpable y temerosa contemplación de la oscuridad.
06 sábado Feb 2016
Posted Senza categoria, Sueño
inEtiquetas
No es extraño que de noche el mundo onírico de la vida y de la muerte se superpongan hasta hacer difícil notar sus diferencias.
29 viernes Ene 2016
Posted Senza categoria, Sueño
inEtiquetas
Desde hace tiempo no logro recordar lo que sueño. Esta noche soñé, como de costumbre, con una infinidad de cosas pero lo único que recuerdo es la fuga de una joven amada, que no conocía, junto con dos personas que tampoco conocía. Tal vez no nos acordamos de ciertos sueños propio porque están habitados por personajes que no conocemos o, sobre todo, que no queremos conocer.
27 miércoles Ene 2016
Posted Senza categoria, Sueño
inEtiquetas
Frecuentemente, por su influencia global, la vida onírica condiciona, a veces de modo dramático, la vigilia, causando estados de confusión a los que se intenta escapar propio durmiendo. El único resultado: un torbellino absurdo donde dos reales irrealidades opuestas se persiguen sin alcanzarse nunca.
30 miércoles Dic 2015
Posted Senza categoria, Sueño
inEtiquetas
Un signo en un sueño.
10 jueves Dic 2015
Posted Senza categoria, Sueño
inEtiquetas
En la oscuridad de la noche cierro los ojos y me dejo devorar por las sombras oscuras que ya no puedo ver más. En ese momento el tiempo no pasa y mi mente excéntrica me cubre con la colcha. Un beso en la frente y luego vuela fuera de la ventana donde la nieve de tantos años atrás todavía está cayendo para borrar sin rumor nuestras huellas. Es así que, a veces, duermo.